lunes, 15 de febrero de 2010

¡COCINERO, COCINERO!


Hace unos meses, dentro del programa AVD, para entendernos, educación para la salud, la monitora nos planteo como actividad tener un rincón de cocina, al que todos por unanimidad le pusimos el nombre "LOS EMPANADILLAS". Hicimos un mural dividido en 4 partes: 1º plato, 2º plato, postre (este es el que más me gusta) y un último dónde vamos poniendo diferentes trucos de cocina.
Todos los viernes dedicamos 5 minutos para proponer alguna receta, con todas ellas nos estamos haciendo un artesano libro de cocina. Entre otros de los objetivos, además de llevar una dieta saludable es que vayamos probando a cocinar cosas nuevas.
Este fin de semana con ayuda de mi madre, me animé a experimentar, la receta elegida fue: "POLLO CON SALSA DE ALMENDRAS" . Esta mal que lo diga, pero fue todo un ¡éxito!, mi hermana ya me ha preguntado con que les voy a deleitar el próximo fin de semana, yo la he dicho que el próximo le toca a ella, ¡le puedo dejar recetas!. Yo haré de jurado.

Aquí os dejo la receta para que os animeís.

INGREDIENTES:

1 pollo troceado,
6 dientes de ajo,
1 cebolla (para llorar un poco),
1 vaso de vino blanco,
1 poco perejil (nosotros como el Arguiñano),
2 tostadas de pan,
20 g de almendras (por eso es pollo con almendras),
2 vasos de caldo de pollo,
harina, aceite de oliva, pimienta y sal.

ELABORACIÓN:
Salpimentamos el pollo y pasamos cada trozo en harina. A continuación se dora en una sartén con aceite, ¡atención!, sólo hay que dorar o para entenderlo mejor semicocinar, ok?

Aparte pelamos la cobolla y la cortamos en trozos muy pequeños para rehogarla después con un poco de aceite a fuego muy lento. Para cortar la cebolla sin llorar hay un truco de cocina: meter la cebolla durante 5 minutos en el congelador antes de cortarla, ¡funciona!, lo he comprobado.

En una sartén pequeña freímos las almendras hasta que tomen color, una vez retiradas del fuego, vamos a usar ese mismo aceite para dorar el pan, luego los ajos cortados en láminas (luego las manos nos van a oler a ajo, para esto no tengo truco,¡cachis!) y, por último, el perejil.

Echamos todos los ingredientes en un mortero y preparamos una pasta bien mezclada mientras ¡cantamos una jota!.

Sobre la cebolla que hemos rehogado anteriormente, ¿os acordaís?, vertimos el vino blanco, el caldo y el pollo, y dejamos que se mezcle todo bien.
Incorporamos la pasta que se encuentra en el mortero y dejamos cocer todo bien juntito, durante nada más y nada menos que 25 minutos.

Una vez que el pollo esté tierno, lo servimos con la salsa muy caliente y cuidando mucho la presentación, ¡para dejarlos a todos con la boca abierta!.

En síntesis: tardas en total unos 40 minutos, como habeís podido comprobar el grado de dificultad es más bien bajo, lo mejor de todo es que tiene poco aporte calórico, ¡para guardar mejor la línea! y está para chuparse los dedos.
¡Qué más se puede pedir!

4 comentarios:

CRPS León dijo...

Pues a ver cuanto te animas y nos traes al centro un bizcocho para degustarlo. Que cocinillas eres.
Teo

CRPS León dijo...

¿Que qué más se puede pedir? Que te lo lleven a casa , te den de comer, y si es una buena chati mejor que mejor, ¿o no?
A ver cuando nos invitas a todos a comer un día a casa, a tu madre a lo mejor le da un patatus.
Yo llevo el agua, porque con la medicación no se puede beber, a lo mejor me excedo y llevo un zumo.Ja,ja,ja
Fernando

Hermi dijo...

Pues sin duda alguna, es una receta con muy buena pinta, ¿no os parece?.
Habra que hacerla.

Blog Unidad Rehabilitación Salud Mental Hospital Macarena dijo...

Gracias por todos los comentarioos que me habeis hecho la verdad que me han gustado mucho y me sirven de animo para seguir corriendo con mas ganas que nunca ,y no venirme abajo por nada la verdad que se agradece un montón. Que bonito y curioso lo de cocinar yo la verdad que es una de las cosas que mas envidio el saber hacer de comer ,yo muchas veces le ayudo a mi madre a fregar y me pego al lado de ella en la cocina y le digo muchas veces que me gustaria saber cocinar y ella me dice que es lo mas facil que hay porque yo ya te digo que no me importaria aprender porque aparte de ser util te puedes valer por ti mismo sin ayuda de los demas.
Un abrazo Juan Antonio de la Cruz Mesa